La reveladora entrevista de Alexandra de Hannover: «Quiero una vida normal»

[SHAKIRA]

Alexandra de Hannover (20 años), la hija más pequeña, y desconocida de Carolina de Mónaco, fruto de su relación con Ernesto de Hannover, concede esta semana una entrevista a la revista «Telva» en la que por primera vez habla sobre sus aspiraciones, desvela ciertos aspectos de su personalidad pero evita pronunciarse demasiado sobre su familia. Lo cierto es que su timidez, sumada al papel protagonista de su hermana mayor, la mediática Carlota Casiraghi, en el Principado de Mónaco, la han situado tradicionalmente en un discreto segundo plano. Sin embargo, por lo que se desgrana de su entrevista, su discreción no está reñida con la personalidad de una joven que parece tener muy claro lo que quiere en la vida. «Siempre tuve claro que quería ir a la universidad. Y así lo hice. Estudio en la Universidad de Nueva York, Ciencias Políticas y Filosofía. Pero más con el deseo de nutrirme intelectualmente que con una visión laboral. Es que me encanta leer», una pasión para nada reñida con su otro gran amor: la moda. Y es que tiene dónde fijarse. «Me gustaría dedicarme a algo relacionado con el arte o la moda. Creo que sería una gran personal shopper. Compraría para los demás, así que disfrutaría de ese placer pero en un segundo plano, sin sentirme culpable. Me quedaría con la mejor parte», señala. Además de la lectura y la moda, la joven princesa, que es la que más títulos ostenta de todos sus hermanos, tanto por parte paterna como materna, el deporte ha sido para ella otro pilar fundamental. Desde niña se ha dejado la piel en el patinaje sobre hielo, pero tuvo que dejarlo cuando comenzó a prepararse para acceder a la Universidad: «Admiro esa mezcla que tiene de componente artístico y de disciplina atlética. Su nivel de exigencia. Tenía, por supuesto, que aparecer cada día en los entrenamientos, pero había algo mejor; saber que nadie podía hacerlo por mí. Al deporte le da igual quién seas o de dónde procedas. Debes esforzarte igual que los demás». Desde la separación de sus padres, que a día de hoy siguen casados a pesar de hacer vida completamente por separado, Alexandra siempre ha estado más cerca de su madre y sus hermanos Andrea, Carlota y Pierre Casiraghi, no obstante, también mantiene buena relación con los otros vástagos de su progenitor: Ernesto y Cristian. Sobre su familia, prácticamente la única alusión que hace es al abrigo con el que acude a la entrevista y que ha tomado prestado del armario de su madre. No se pronuncia sobre la misteriosa separación de sus progenitores ni sobre la enfermedad de Ernesto, al que lleva sin ver, según apunta «Vanitatis», desde la boda de su hermano Cristian, celebrada en 2018. Alexandra se presenta al mundo como una joven sencilla a pesar de la gran cantidad de títulos que ostenta: «No soy aún del todo consciente de que yo pueda tener una voz. Tampoco de mi condición de princesa, trato de no pensar en ello sin dejar de agradecer, por supuesto, lo privilegiada que he sido. Pero quiero una vida normal».

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