Lo que un chef experto en guisos nunca echaría a un potaje: "Admite casi de todo, menos esto"
El potaje representa la esencia misma de la cocina española: sencillez, calidad y sabor. Y de esto sabe mucho José Carlos Fuentes, quien nos cuenta sus claves
Los potajes, platos emblemáticos de la gastronomía española, han sido durante siglos la expresión más genuina de la cocina tradicional. Con su base de legumbres, verduras y pescado, este guiso ofrece sabores que nos conectan con nuestras raíces culinarias más profundas. En este contexto arraigado en la tradición gastronómica de nuestro país, surge la voz del reconocido chef José Carlos Fuentes, quien comparte su visión sobre lo que no debe faltar jamás en un buen potaje.
Si pensamos en este plato, lo primero que se nos viene a la cabeza es la mesa de nuestras abuelas. El potaje representa la esencia misma de la cocina española: sencillez, calidad y sabor. Y es precisamente en este marco donde Fuentes, con su amplia experiencia en la alta cocina tanto nacional como internacional, nos revela sus secretos y preferencias en torno a este manjar de la gastronomía patria.
La importancia de ingredientes excepcionales para lograr un sabor espectacular
Tradición en estado puro
En un momento en el que la gastronomía se ve influenciada por tendencias exóticas y fusiones creativas, la voz de José Carlos Fuentes resuena con fuerza, recordándonos la importancia de valorar y preservar nuestras raíces culinarias, incluso en los platos más simples y tradicionales como el potaje.
A través de una charla con el chef, nos adentra en el mundo de los guisos, destacando la importancia de ingredientes excepcionales para lograr un sabor espectacular. Pero, más allá de las recetas y técnicas culinarias, Fuentes comparte un detalle controvertido: lo que nunca añadiría a un potaje, incluso admitiendo casi de todo, es la patata.
Con esta premisa arraigada en la tradición, José Carlos nos enseña cuál sería la receta perfecta para él de un buen potaje: "Mi receta se basa en un buen sofrito, contundente y concentrado, donde se incorporan garbanzos previamente cocinados, pero esencialmente deben ser garbanzos sin pellejo, manteniéndose tiernos. Finalmente, añado un bacalao de lomo grueso y jugoso, que culmina en una combinación de sabores que invita a mojar pan hasta el codo", explica.
En esta era de la innovación gastronómica, el potaje emerge como un símbolo de resistencia, un recordatorio de que la verdadera esencia de la cocina reside en la calidad de los ingredientes y el respeto por las recetas tradicionales que han perdurado a lo largo del tiempo.
alimente.com / M. Nieto , 22 marzo 2024
22-Mar-2024, 11:36
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