¿Es realmente bueno que nuestros perros y gatos duerman con nosotros?

[valalca]

Las opiniones entre los dueños están muy divididas: hay quien prefiere que ni se acerquen a un lugar tan íntimo como la cama mientras que otros no podrían dormir tranquilos sin ellos

Si tienes un can o un felino de mascota y más de una vez has dejado que se suba a la cama para dormir a tu lado es posible que te hayas familiarizado con el hecho de despertarte con las sábanas llenas de pelos o que sus ronquidos te hayan desvelado. A fin de cuentas, como cualquier otro animal, ocupa un espacio, y dependiendo de lo grande o pequeño que sea te resultará más o menos cómodo tenerlo cerca cuando estás en los brazos de Morfeo.

Pero más allá de la relativa comodidad de dormir o no con tu mascota está la pregunta por la salud. Como es obvio, al dejarle un espacio en la cama a un perro o a un gato estás permitiéndole pasar bastantes horas en un sitio tan íntimo y personal como es la cama, donde precisamente más indefenso te encuentras ante las amenazas patógenas. Es por ello que fue en el siglo pasado cuando empezaron a surgir voces científicas que alentaban a no compartir lugar de descanso por miedo a contraer enfermedades: desde superbacterias que puedan diseminar hasta infecciones parasitarias transmitidas por ácaros, garrapatas o gusanos intestinales.

Dormir con el can puede inducir a la liberación de oxitocina en el cerebro, lo que disminuye tus niveles de cortisol y presión arterial, reduciendo el estrés

Otro de los motivos por el que se empezó a desanimar el hecho de dormir con mascotas es por el riesgo de 'malcriar' al animal, en especial a los perros, ya que sus dueños necesitan imponerse como reyes de la manada para que sean educados correctamente. Al fin y al cabo, el lugar del perro históricamente siempre ha sido el suelo o un lecho para canes, por lo que si se acostumbra a dormir en tu cama puede acabar pensando que es algo más que un perro o que efectivamente él es el rey de la manada.

Pros y contras

Uno de los beneficios de dejar que tu perro se suba a la cama para dormir es que tendrás menos probabilidades de sufrir síntomas relacionados con la ansiedad o la depresión, como reconoce la veterinaria Amanda Nascimiento en un artículo de la revista 'Pop Sugar'. Además, "la cercanía que sentimos con nuestras mascotas puede reducir la presión arterial", reconoce la experta. "Dormir con el can puede inducir a la liberación de oxitocina en el cerebro, lo que disminuye tus niveles de cortisol y presión arterial, aliviando así este tipo de trastornos mentales".

En cuanto a si realmente corremos un riesgo de ser contagiados por parásitos o bacterias, como habrás podido comprobar en caso de que el animal ya se haya acostumbrado a compartir lecho contigo, las probabilidades son muy bajas. Así lo cree James Logan, experto en control de enfermedades infecciosas británico, quien argumenta que estar expuesto a alguno de estos organismos en realidad podría resultar "hasta beneficioso". ¿Las razones? "Las personas que han crecido con mascotas y otros animales tienden a sufrir menos alergias, por ejemplo", comenta en 'The Guardian'. Evidentemente, lo primero que tienes que hacer para asegurarte de no contraer ninguna enfermedad es mantener a tu mascota a día con los tratamientos antiparasitarios del veterinario.

Sin embargo, hay veterinarios como Jess French que opinan que el hecho de permitir que el can ocupe un espacio de la cama puede provocar que desarrolle actitudes posesivas o un tanto agresivas, como por ejemplo ladrar a otros perros o personas sin razón o no poder quedarse solos en casa. "La mayoría de los veterinarios suelen recomendar no permitir que los perros duerman próximos a los niños de la casa", asegura, "ya que pueden estresarse demasiado cuando estás fuera". El can, como cualquier otro ser vivo, debe acostumbrarse a ser más independiente y no depender tanto de afecto o la compañía de sus dueños.

Espíritu felino

En cuanto a si es recomendable permitir que los gatos duerman contigo también existen una mezcla de pros y contras. Por un lado, los gatos no son tan humanos como los perros, en el sentido de que no se amoldan fácilmente a los ritmos vitales de sus amos, sino que van un poco por libre. Por ello, es posible que te resulte más incómodo pasar la noche con ellos porque lo más seguro es que se despierten varias veces y, al ver que su dueño no está despierto, intente sacarle de su sueño llamando la atención, haciendo ruido o tirando más de un objeto de su sitio.

Pero por otro lado, y como explicábamos antes, si en verdad le aprecias mucho o crees que él te aprecia mucho a ti, lo más probable es que no te importe que suba a la cama por las noches y comparta espacio contigo. Al fin y al cabo, las mascotas son una fuente de felicidad y tranquilidad para sus dueños, por lo que no solo te sentirás mejor contigo mismo y más querido, sino también más seguro y protegido frente a los demonios que quieran venir a enturbiar tu sueño.

elconfidencial.com / ACyV. 26 mayo 2021