La extraña realidad de un San José sin toros

[SHAKIRA]

El día de San José va ligado a la capital valenciana. La luz, la pólvora, el fuego de las Fallas ha tenido siempre en la plaza de toros los mejores carteles. Los nombres más rutilantes de la tauromaquia. Así ha sido siempre hasta hoy, con las fiestas, corridas de toros incluidas, suspendidas por la pandemia del coronavirus. Frente al esplendor en el ruedo de las Fallas, en Madrid, la fecha del 19 de marzo se ha aprovechado para dar oportunidad a los jóvenes toreros. Desde su inauguración, la plaza de Las Ventas ha celebrado el santo con 45 festejos, casi todos novilladas, excepto una corrida de toros y una de rejones; si bien en la última década, con la obligación de las empresas de comenzar la temporada el último domingo de marzo, la festividad está huérfana de toros en la plaza más importante del mundo. Así las cosas, el día de San José se ha quedado sin toros en Valencia y en Madrid. En el coso levantino había anunciados dos festejos, una corrida de toros y una matinal de rejones. Eran el final de una feria que estaba marcada por la reaparición en ruedos españoles de Roca Rey y el doblete de Enrique Ponce. También, en su vecina Castellón se celebraba una corrida de toros dentro de la Feria de la Magdalena. En Las Ventas, inaugurada en 1931, la primera novillada josefina tuvo lugar en 1941. Los novillos de Tassara y la terna formada por Revertito, Bartolomé Guinda y Julio Chico no hicieron historia. Desde entonces han sido muchos, decenas, los novilleros que acudieron a Madrid con toda su carga de ilusiones intacta. Pocos consiguieron sus objetivos, y menos los que, pese a las ilusiones que despertaron en los aficionados en día tan señalado, culminaron con éxito sus carreras. En aquellos años destacaron Antonio Ordóñez, uno de los elegidos, en el 50; Miguel Ortas al año siguiente, y Félix Saugar «Pirri», en el 55 ante novillos de Manuel Arranz. Con todo, el triunfo más resonante conseguido un 19 de marzo en Las Ventas fue el cosechado por el infortunado diestro portugués José Falcón, que, en 1968, cortó tres orejas en la tarde de su presentación a una excelente novillada de María Cruz Gomedio. Diez años después, Luis Miguel Ruiz abrió la puerta grande con astados de Jiménez Pasquau. Y entre las mejores ganaderías, las ya citadas de Gomedio y Pasquau, y dos tardes de La Guadamilla, en las temporadas de 1995 y 1998. Con toda la historia de las esplendorosas Fallas y del vivero novilleril de Las Ventas, la realidad es que, ni en una ni en otra plaza, el día de San José de 2020 se celebra sin toros en Valencia y en Madrid.

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