Un proyecto de arte urbano nos invita a romper el confinamiento sin salir de casa

[winche]

Un proyecto de arte urbano nos invita a romper el confinamiento sin salir de casa
El artista Pejac ha creado una iniciativa para dejar volar la imaginación desde las ventanas de nuestras casas
La propuesta bautizada con el hastag #stayarthomepejac ha recibido cientos de respuestas en forma de fotos y vídeos de más de 50 países
La crisis del coronavirus ha obligado a millones de personas a confinarse en casa para evitar el contagio. En España llevamos encerrados un mes, saliendo tan sólo para lo más esencial. Una situación que, con más o menos restricciones, se está replicando alrededor del mundo.

Al artista español Pejac el encierro le ha tocado pasarlo en su casa en Madrid y desde allí ha lanzado una iniciativa a través de sus redes sociales para invitar a la gente de todo el mundo a coger sus bolígrafos, pinceles, papeles y tijeras, y unirse a él para construir una obra monumental de arte urbano desde casa.

"Siempre creí que todo el mundo tenía un artista escondido en su interior y que si les das una buena razón son capaces de hacer cosas maravillosas. En estos extraños días de cierre global, creo que la creatividad puede ser una de las mejores terapias para luchar ansiedad y aburrimiento”, afirma el artista.

La idea surgió como una forma de pasar su propio encierro. Para ello, Pejac retomó un antiguo concepto de dibujos en miniatura pegados sobre las ventanas que interactúan con la vida exterior y movido por el hecho de que la mitad del mundo también está ahora mismo limitada a las cuatro paredes de sus casas, decidió invitar a las personas a unirse, explorar su creatividad y hacer arte urbano desde la seguridad de sus hogares utilizando la vida exterior como fuente de inspiración y telón de fondo para el trabajo.

La respuesta obtenida hasta la fecha, según el propio artista, ha sido “abrumadora”. Cientos de personas han enviado sus obras de arte desde más de 50 países de todo el mundo y las fotografías y los vídeos siguen llegando. España, Italia, Francia, Alemania, Turquía, Estados Unidos, Vietnam, Irán, India o Brasil son sólo algunos de los lugares desde donde han llegado obras para las que tan sólo hace falta un trozo de papel, perspectiva e imaginación.

Para Pejac esta iniciativa puede servir para “levantarse poéticamente contra la propagación del virus” y es, además, “una forma nueva y simple de jugar y crear, así como de capturar y compartir este momento histórico único, por lo demás duro y complejo”.