Morcillo asado con puré de patatas

[pitufina]

para 4 personas:
1 k de morcillo de ternera
4 patatas grandes
300 ml de caldo de verduras
125 ml de vino blanco
1 cucharada de harina de maíz refinada
aceite de oliva virgen extra
sal
pimienta




Calienta una sartén grande con 3 cucharadas de aceite. Salpimienta el morcillo, introdúcelo en la sartén y dóralo bien por todos los lados. Pon la carne a un recipiente apto para el horno.

Retira el aceite de la sartén, agrega el vino blanco y dale un hervor fuerte. Añade el caldo, remueve los ingredientes (vino y caldo) y vierte la mezcla sobre el morcillo. Introdúcelo en el horno (precalentado) y hornéalo a 180ºC durante 1 hora.

Lava las patatas, ponlas (con piel) en la olla, cúbrelas con agua, sazónalas y cierra la olla. Cuécelas durante 6-8 minutos a partir del momento en que suba la válvula.

Pélalas las patatas, trocéalas ponlas en un bol y májalas bien. Condimenta el puré con sal, aceite y un poco de perejil picado.

Pasa la carne a una fuente y resérvala. Pasa el caldo a una sartén y dale un hervor fuerte hasta que reduzca un poco. Mezcla 1 cucharadita de harina de maíz refinada con agua fría (125 ml), agrega un poco al caldo y dale un hervor (removiéndola) hasta que ligue. Corta la carne en filetes.

Reparte los filetes de morcillo en 4 platos y salséalos. Con ayuda de 2 cucharas forma unas quenelles (bolas alargadas con forma de croqueta) y sírvelas al lado.